Si te decimos que el agua es vital para tu salud y bienestar es algo que probablemente ya sabías. Pero además, el agua es esencial para favorecer tus entrenamientos. Es por ello que queremos darte algunos consejos para que consigas beber más agua antes, durante y después de entrenar, ya que la hidratación en el deporte es fundamental para tener un cuerpo saludable y conseguir los mejores resultados.
¿Sabías que tras correr una hora nuestro organismo puede perder en torno a 1,8 litros de agua? Por eso, mantenerte hidratado de forma correcta es fundamental, sobre todo cuando practicas deporte, ya que la sudoración hace que tu cuerpo pierda más agua, además de minerales.
Hay que tener en cuenta que nuestro organismo está compuesto por un 70% de agua y, por tanto, para que funcione correctamente es esencial mantener estos niveles en óptimo estado. La pérdida de líquidos y minerales (el sodio, el cloruro, el potasio, el calcio y el magnesio) durante el esfuerzo físico puede ser muy rápida, sobre todo si lo realizas al aire libre durante un día soleado, ya que de este modo, la evaporación del sudor es más veloz y corres mayor riesgo de deshidratarte sin darte cuenta.
En nuestra dieta diaria podemos obtener minerales a través de las legumbres, lácteos, cereales integrales, carne y pescado. Pero si tienes una dieta pobre en sales minerales también puedes optar por suplementos nutricionales como nuestros efervescentes Salt, o por complementos vitamínicos como Multi Pack.
La importancia de la hidratación en el deporte
La falta de hidratación puede tener consecuencias negativas, como por ejemplo: aumento de la frecuencia cardíaca, hipertemia, calambres, cefalea… Beber líquido es esencial para cuidar nuestro cuerpo y conseguir tenerlo en perfectas condiciones para el desgaste físico. Es muy importante que no esperes a tener sed para beber, por eso es recomendable ingerir líquidos antes, durante y después del ejercicio.
· Antes del ejercicio
Hidratarnos antes de realizar cualquier actividad física es conveniente, ya que es una forma de preparar a nuestro cuerpo para este mayor esfuerzo. Empezar a practicar deporte con algo de deshidratación supondrá que nuestro rendimiento será mucho menor que si lo hacemos estando en un óptimo estado de salud. Por ello, es aconsejable beber alrededor de medio litro de agua entre 1 y 2 horas antes de comenzar la rutina de entrenamiento.
De esta forma conseguirás que tu organismo esté totalmente hidratado, disminuyes las probabilidades de lesionarte, y evitas que la temperatura corporal suba. Si eres de los que les resulta aburrido beber agua, puedes darle sabor con nuestras Bebidas Boleros, una forma diferente y sabrosa de tomar líquido sin azúcar y con más vitaminas y minerales. Descubre todos sus beneficios y sabores.
También puedes probar nuestra receta de limón y menta, la mezcla perfecta de aminoácidos y vitaminas que te ayudará a quemar grasas y a darte un plus de energía. Esta refrescante bebida es ideal para beber agua de una forma más divertida y deliciosa.
· Durante el ejercicio
Hidratarte mientras haces deportes te permitirá conseguir que los entrenamientos sean más productivos, gracias a que tu organismo está fuerte y saludable. Hay que beber entre 200 y 250 ml de líquidos (dos o tres sorbos) cada 20 o 25 minutos, aproximadamente. De esta forma, repondrás el agua perdida a través del sudor, y conseguirás mantener los niveles de glucosa en sangre estables.
La hidratación permite que el corazón pueda bombear la sangre con total libertad y que los nutrientes y el oxígeno se repartan correctamente por el organismo y, también, por los músculos. Por tanto, te sentirás con más fuerza y energía durante la sesión de entrenamiento, algo que te ayudará a dar el máximo de ti. Durante tu rutina puedes optar por agua, por alguna bebida energética como nuestro BCAA Energy Zero, o llevar tu shaker con tu bebida deportiva ya preparada.
· Después del ejercicio
La rehidratación después de hacer deporte es tan importante como la hidratación antes y durante el entrenamiento. Hay que comenzar a reponer líquidos cuanto antes, y realizarlo durante la hora siguiente a la práctica deportiva. El consumo de agua es la mejor opción, ya que esto ayudará a restaurar la temperatura a un nivel normal.
Otra de las mejores opciones para hidratarte después de practicar deporte es tomar tu batido de proteínas, ya que te permitirá recuperar los líquidos perdidos, al mismo tiempo que ayudas a tus músculos a recuperarse. O si lo prefieres, en verano puedes optar por tomar tu batido de proteínas en forma de helado con recetas tan ricas como esta.
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